MARIO ARANO

El señor del box

Es uno de los empresarios boxísticos más importantes del país, con una reputación internacional digna del mayor de los elogios. Maneja a Lucas Matthyse, el sexto boxeador más importante del mundo.

“Nací en Moreno, Buenos Aires, pero a los cuatro años me fui a vivir a General Pinto. Me considero pintense. Hice boxeo desde los 17 años con Polo Rodríguez, yo era el ayudante. La primera pelea importante que se hizo yo tenía 18 años y fue Mario Omar Guillotti que a los quince días de haber llegado de Winnipeg peleó con Polo. Empataron a estadio lleno en Pinto.
Yo practiqué siete años, hice una sola pelea y perdí. Comenzamos a trabajar con el box en Pinto y un día apareció Cuty Barrera. Él empezó con Gerardo Aguilera, después comenzó a trabajar con migo y habrá hecho más de ochenta peleas. Cuando consideramos que llenábamos los estadios en Pinto, nos vinimos a Junín con una mano atrás y otra adelante. Por eso cuando volvemos a Pinto con Cuty y vemos el reconocimiento de la gente es algo inigualable.
 La primera pelea acá fue en el año ´88 en Ciclista y vendimos 2100 entradas. Ahí decidimos quedarnos en Junín. Ninguno de los dos teníamos el nivel ni la forma de vida de hoy en día. Logramos poner un gimnasio en la parrilla del club Ciclista, de ahí mi gran afecto por el club. Tamburini padre y el Pollo Griselli nos dieron una mano importante porque fue sin costo alguno. Luego estuvimos en Los Indios y después comenzamos a crecer. Firmamos con la Hiena Barrios, Locomotora Castro, la Tigresa Acuña, Wilfredo Vílchez, Roberto Arrieta y en el 2000 aparece la pantalla grande de Space. Anterior a eso trabajamos con BCC, América Sport y el viejo canal Azul”.

Sacar un crack

“Es muy difícil hacer un boxeador. No fue fácil lograr un púgil como Lucas Matthyse. Él hace 10 años que está en Junín. Fue a dos concentraciones de Maravilla Martínez en Los Ángeles con todo pago por parte de nuestra empresa. Después estuvo en Las Vegas y México. Todo eso formó parte del aprendizaje, junto con Cuty Barrera como técnico que está dentro de los siete mejores entrenadores del mundo y entre los tres mejores de la Argentina. Lo que pasa es que lo vemos a Cuty en Junín como vecino, pero es uno de los más respetados del mundo.
A esta inversión hay que ir agregándole el equipo. Un médico como Eduardo Leguizamón que ya hace siete años está con nosotros, un preparador físico que trajimos de Rosario a vivir a Junín especialista en deporte individual, vino Juan Martín Látigo Coggi (que está al lado de Cuty y aceptó ser el ayudante de Luis), una dietista, trajimos al Cirujano Morales que es el manoplero y vino de Santiago del Estero y mi hermano que es el encargado de organizar todo el grupo en los EE.UU. que es lo más importante. Hoy hay ocho personas que atienden a nuestra figura estelar que entrena todos los días en Junín. Está entre los seis mejores peleadores del mundo. Mayweather, Pacquiao, Canelo Álvarez, García, Matthyse y de ahí para abajo todos. Broner, Amir Khan, etc.
La gente que no conoce, cree que vamos a EE.UU. a descansar. Pero la realidad es que llegamos y el lunes comienzan las sesiones de fotos, las entrevistas, vamos a las charlas con la producción, los entrenamientos, los estudios médicos. Es una semana que se trabaja durísimo para poder llegar al día de la pelea en condiciones.
Estamos orgullosos de representarlo y de haber logrado posicionarlo de esta manera en el mundo. Es muy difícil encontrar otro. Tenemos boxeadores de primerísimo nivel y grandes proyectos en el gimnasio. Pero tiene que haber una combinación de todo para que salga un Matthyse, que no puede salir a caminar en los EE.UU. Es más conocido allá que en Junín. La gente se saca fotos permanentemente, a solo tres pasos de haber salido a la vereda del hotel”.

Lo que viene

“El próximo rival  ya no es problema nuestro. Nos había costado remontar después de haber perdido con García. Es que no puede ganarle García, tuvo esa noche especial que  no la va a volver a tener. De hecho si hay revancha la pelea va a durar cuatro o cinco rounds. Cuando había que recuperarlo. Eso nos llevó dos peleas y éste último rival lo elegí yo porque Oscar de la Hoya nos ofrecía otro. Pero quisimos enfrentar  éste que estaba cuarto en el mundo. El resultado está a la vista. Es un problema de la TV. Matthyse es un producto súper importante para Show Time o HBO. Ellos son los responsables de proponernos el negocio.  Está dentro de los  mejores del mundo y listo para pelear con cualquiera.  Nunca hemos rechazado rivales. Pero la TV  deberá decidir qué negocio le sirve y yo tendré que discutir el dinero y los tiempos”.

Posicionamiento

“Hace 23 años atrás alguien me iluminó una mañana que me estaba duchando y decidí encarar los Estados Unidos. Yo era un convencido que para lograr objetivos claros y que el dinero aparezca para que nuestra empresa crezca, teníamos que firmar con un promotor norteamericano. Firmamos con Burak Mujama, presentó quiebra y quedamos aislados. Luego firmamos con Ray Sugar Leonard, se fue  a hacer la película El Container con Silvester Stallone y nos volvimos a quedar en banda. Después lo empecé a seguir  a Oscar de la Hoya (seis meses) hasta que me atendió. Fue hace 10 años atrás y acá estamos. Yo no hablo inglés, pero me hago entender. La gente de Golden Boy ahora habla español, pero antes era difícil. Me manejo para viajar, pedir un auto, un hotel, comida, cosas sencillas, pero no para mantener una charla formal.
Hemos logrado desde Junín –por eso respeto y quiero mucho a esta ciudad- posicionar al boxeador argentino en un lugar de privilegio. Hablo del boxeador argentino porque nadie hizo esto. A Maravilla lo llevamos nosotros, al Chino también. Es más, estoy relacionado con el Chino porque yo lo llevé a Golden Boy.  La revolución que se armó en EE.UU. y el posicionamiento del box argentino desde ocho años a esta parte con  Maravilla, el Chino y Matthyse, estuve involucrado yo”.
 
La pantalla

“A mí me costó cuarenta años poner un boxeador de la talla de Matthyse arriba de un ring en los EE.UU. Tengo 61 años y mi licencia de promotor la logré a los 21. No tengo más tiempo. Tiene que haber  un despegue fenomenal entre los cuarenta contratos que tenemos para que salga otro Matthyse, que lo reclamen las cadenas televisivas más importantes del mundo. Que lo respeten los grandes promotores del mundo y que los boxeadores hablen de él, como Broner, García, Mayweather, Pacquiao que quiere pelear con nosotros. Y lo vamos a pelear. Esto lo posiciona en un sitial que yo no sé si voy a tener tiempo de acompañar a otro. Ojalá aquí sea. Pero cada vez que yo subo al ring en EE.UU. disfruto muchísimo de esto. Hoy nuestra promotora tiene una sociedad nada menos que con Golden Boy donde Oscar de la Hoya es su presidente. Tenemos Visa de trabajo en los EE.UU. lo que indica que boxísticamente pertenecemos a los Estados Unidos. Pero no nos vamos a mover de acá. Estamos con otros proyectos. Vamos a americanizar nuestra promotora. Hoy Oscar de la Hoya firmó un convenio con la red O´Globo. Ya hicimos una prueba piloto en enero y pasado el mundial de basquet reanudamos el quince de noviembre. HBO Plus me está pasando doce peleas anuales, tenemos 16 fechas de Direct TV, es decir crecimos mucho. Pero lo más importante es todo el reconocimiento de la gente hacia nosotros”. 

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