El gran ausente: el tren

Con el transcurrir de los años, el fuerte Federación había tomado ya el nombre Junín, con crecimiento lento al principio, como si se prepara para la llegada del ferrocarril y la primera locomotora, el 13 de mayo de 1884, con un festejo importante, jubiloso, que significaba para los ciudadanos del lugar una era de progreso, prosperidad y bienestar, primordial para lo grande que es hoy Junín.
El taller. En la historia de los pueblos, casi siempre existe algo que se conserva y se recuerda como tradición, con gratitud, nostalgia y con amor.
En la historia de Junín, el momento de mayor trascendencia nos recuerda la inauguración del pequeño gran taller mecánico del F.C. Pacífico que se efectuó en la tarde del sábado 30 de octubre de 1886.
En la actualidad será muy utópico pensar en una red ferroviaria. Según el gobierno del 2003, en su discurso –compromiso que después no se cumplió– todo podía ser: pero muy poco o casi nada se hizo.
La gran mayoría del pueblo argentino coincide en que nada será nada como antes; pero yo no me doy por vencido.
Alguna vez seremos más humildes y, en vez de tren bala, pensaremos en una red de 160km/h –velocidad media–, en la que llegaremos a todo el país.
Sabemos que, en la demografía de nuestro país con muy pocos habitantes por km2, las distancias que nos separan a nuestros pueblos (aprox. de 15 a 17 km. de una estación a otra), los movimientos migratorios internos, las economías regionales no son estables todavía.
Pero de lo que no tengo dudas es de una falta de políticas estratégicas (porque no lo han demostrado los políticos de turno) en todos los órdenes: educación, defensa, economía, a lo largo y a mediano plazo.
¿Cuál es el destino de nuestro país? Si no tenemos claro esto, menos vamos a tener lo que podría ser una red ferroviaria actualizada. Mal o bien teníamos todo y, ahora si algún día la volvemos a tener, ¿cuánto será su costo?. Ej: Aerolíneas Argentinas.
Nuestro país se caracteriza por tener una muy baja densidad poblacional y, según investigaciones, figurará entre los países más urbanizados del mundo. Al paso que vamos, con los problemas del campo, más rápido la gente se pasará a la ciudad.
El ferrocarril produjo en nuestro país, como era de esperar, una transformación en la sociedad y en las economías regionales.
A partir de los '40, durante el gobierno peronista sufrieron otro ataque con el invento argentino: el colectivo. Nuevamente a sufrir los embates en las grandes y pequeñas ciudades con el pasaje de la gente al nuevo y flexible transporte vial.
A todo esto se sumaron el asfalto, las rutas, los vehículos a motor, los aviones y los camiones, que terminaron de sacarle pasajeros y carga.
Pero nunca pensaron en la capacidad de carga de los trenes, en el ahorro del combustible y menos en el medio ambiente.
Habrá llegado el momento de hacer serias inversiones en el área Metropolitana, mejorar y recuperar los trenes y pensar en el tiempo perdido; pero no comprar trenes que después nos damos cuenta que hay que levantar las estaciones un metro, sino utilizar los tendidos de líneas que se puedan recuperar, ver la posibilidad de recuperar el confort de los vehículos y aumentar la velocidad.
Bueno es recordar que el ferrocarril llegó a disponer en todo el país de más de 200 mil empleados, con más de 40 mil kilómetros de vías. Nos mentían que el déficit operativo era de un millón de pesos por día o 400 al año. Ahora que son menos recorridos se gastan más o menos 2 mil millones anuales, y lo siguen subsidiando.
No es cuestión de volverse loco y querer recuperarlo en todo el país. Con una línea por ferrocarril tendríamos suficiente. El Roca, Belgrano, Urquiza, Mitre, como por ejemplo: línea San Martín, una vez o dos por semana, tipo El cuyano o El Cóndor.
Con trenes de carga de 78 vagones, de pasajeros de media velocidad como en Europa (desde Junín a la Capital Federal sin paradas, 1hr y 35', y con paradas en Chacabuco, Rawson Mercedes y José C. Paz, en dos horas).
Esto vale como propuesta y no es una utopía: ¿qué pasa si los gobiernos de la Ciudad de Buenos Aires, las provincias de Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, San Luis, Mendoza, San Juan y el gobierno de Chile se hace una sociedad anónima?
Y nosotros compramos por 1500 millones de pesos en España y Portugal coches viejos, usados, sin repuestos y acá en la cooperativa de Trabajo Talleres Junín hay siete coches portugueses. ¿Para qué si tenemos que adaptarlos? Y ahora en China, son nuevos pero tenemos que levantar las estaciones. ¿Mandan a comprar trenes al enemigo?