Fernández: “Vamos a dejar hasta la última gota por el proyecto de Scioli”

El intendente de Lincoln, Jorge Fernández (FpV), afirmó que en el país hace falta arreglar la microeconomía, aunque sostuvo que la macroeconomía está mucho mejor que en los últimos diez años.
Según el análisis del jefe comunal linqueño, a la gente le alcanza menos la plata, pero en parte porque no se resigna a dejar de consumir. “Si se cortan seis meses las tarjetas de crédito, estaría todo el mundo sonriendo”, afirmó.
El dirigente también habló de temas inherentes a su gestión, de su posible continuidad al frente de la Municipalidad y de las posibilidades del kirchnerismo en las próximas elecciones presidenciales del año que viene.

-¿Cómo avanza la gestión, en un año complicado desde lo económico?
-Las gestiones siempre van. A las complicaciones económicas no las deciden los intendentes ni mucho menos, son las complicaciones de un mundo globalizado desde el punto de vista de la economía y fundamentalmente hay un empantanamiento producto de que hay cosas que se deben arreglar desde hace mucho tiempo y a las que en un momento hay que ponerles fin, como para llevar a cabo negociaciones que nos permitan destrabar créditos internacionales y que el país funcione como debe. Evidentemente, lo de los fondos buitre no tiene que ver con este gobierno sino con situaciones de otros tiempos de la República. Esto que nos ha pasado nos tiene que dejar la enseñanza de que a veces hay que ser los más austeros posible, vivir con lo propio, sin tener que pedir a usureros porque después nos termina saliendo mucho más caro de lo que pensamos.     

-Sin embargo, se están pavimentando muchas calles…
-Tenemos un programa que se llama “Pavimentar” y otro que llevamos adelante con el gobierno nacional que nos permiten hacer muchas obras, a tal punto que en los últimos diez años de esta gestión hemos hecho el cincuenta por ciento de todo el pavimento que se había hecho en ciento cuarenta años. Esto nos hace dar cuenta que podemos hacer un enorme montón de cosas con esfuerzo, con austeridad, con recursos propios y a veces articulando con los propios vecinos también tenemos la suerte de llevar adelante nuevos proyectos.

-El tránsito es un problema en toda la Región ¿Qué se puede hacer para resolverlo?
-El tránsito es un problema en todo el país. Si vas a cualquier ciudad del norte te vas a dar cuenta que nadie usa casco, que todo el mundo trata de hacer lo que a él le parece que le corresponde y no lo que le corresponde a la sociedad, somos un país sin normas y tenemos que normarnos. Siempre vas a encontrar, en cada lugar que vayas, a la oposición, sea cual fuere su color, criticar el tránsito. Yo también fui concejal. Es un tema que depende exclusivamente de la conducta de la gente. Si vos sabés que no tenés que cruzar el semáforo en rojo o que hay que usar casco, no hace falta que te lo diga un funcionario. Es una cuestión cultural donde cada uno hace lo que quiere. Es cierto que debe haber más controles, políticas públicas que contengan mucha sanción y que duelan para evitar cierto tipo de cosas.

-¿En Lincoln se han endurecido los operativos de tránsito?
 -Lo hemos hecho en los últimos diez años enormemente. Cuando yo llegué se hacían 230 multas anuales y ahora debe haber tres mil por año. Yo no me pongo feliz por esto, al contrario, porque esto demuestra que nadie quiere aprender a normarse.

- Desde la oposición cuestionan que Lincoln, a diferencia de otros municipios, no se industrializó…
-La oposición fue gobierno durante setenta y pico de años en este pueblo, y yo no tengo la culpa pero también trabajo para traer industrias. He tenido conversaciones con gente de Monsanto, de Cargill y Nidera y estamos viendo de qué manera podemos generar un programa de desarrollo que tenga que ver con la región. Tenemos acciones de trabajo que son muy importantes y que se reflejan con el tiempo, no se ven de la noche a la mañana.

-¿Cuándo se instalaría el Mercado Central?
-Es una descentralización, ya está firmada y ahora falta que se firme el crédito para llevar adelante la obra pública. Quiero que quede claro que esto no es lo mismo que hace   (Alberto) Samid, que son ferias, esto es armar un pequeño Mercado Central en Lincoln para toda la región, para más de 260.000 habitantes.

-¿Cuáles son los plazos para que esté funcionando?
-No depende  de mí, pero yo calculo que antes de la mitad de 2015 debería estar en marcha la obra en plena construcción.

-¿Qué ocurre con el estacionamiento medido en Lincoln?
-No está funcionando todavía. Se logró aprobar la ordenanza, concurrimos a la Universidad Tecnológica Nacional para que haga un control de monitoreo y vamos a ver si con ellos podemos llevar adelante este programa que será una experiencia piloto y nos hará ver cuánto tiene de utilidad. Si vemos que no tiene utilidad, que no sirve, deberemos rever la situación.

-En La Plata, el sistema depende del Municipio y en Junín hay una empresa privada a cargo, ¿cómo va a ser en Lincoln?
-Posiblemente lo concesionemos, pero nos parece extraordinario trabajarlo con la Universidad Tecnológica Nacional.

-Hace un tiempo usted declaró que quería ser presidente de la Nación. ¿Eso sigue en pie?
-Sigue y seguirá en pie mientras tenga vida, todo hombre de la función pública quiere ser presidente aunque sea por un minuto.     

-¿Qué va a hacer en 2015? ¿Existe la posibilidad de que se postule para volver a ser intendente?
-Creo que todos tenemos un ciclo que cumplimos, ¿no? Me parece que hay otras aristas de la política que también se pueden cumplir y trabajar. Vamos a trabajar para acompañar un proyecto presidencial, nos lo ha pedido el Gobernador, y vamos a dejar hasta la última gota para demostrarle a la región que queremos hacer las cosas lo mejor posible.

¿Lo ve bien a Scioli en la carrera presidencial de 2015?
-Lo veo con fuerzas, con ganas, como tiene que estar un candidato. Después, entre todos tenemos que rediscutir un peronismo más moderno, que nos haga ver que si en esta elección llegan cuatro precandidatos, en los comicios venideros haya diez o veinte si es posible.

¿Qué opina de Massa? ¿Lo ve como parte del kirchnerismo?
-Todos son desprendimientos del peronismo, pero todo el mundo tiene derecho a querer ser. Si el cuero te da o no es otra historia, el que define en el tiempo es el pueblo. Yo a Sergio Massa lo conozco hace muchos años y cuando ocupó algún cargo ejecutivo siempre tuvo benevolencia con nosotros, pero hoy estoy mucho más cerca de Scioli.  

-¿Cree que el destino del Frente para la Victoria en las elecciones va a estar atado a lo que ocurra en la economía del país?
-La macroeconomía de la Argentina está mucho mejor que hace diez años, hay que resolver el tema de la microeconomía, el bolsillo de la gente. Las cosas han tenido un deslizamiento de precios y hoy a la gente le alcanza menos la plata, pero estamos imbuidos en un momento de consumo donde queremos comprar todo y ya no se puede comprar todo. Yo tengo un eslogan: habría que suspender las tarjetas de crédito por seis meses y la gente volvería a sonreír.