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NOCHES VIOLENTAS

El drama del joven que perdió un ojo por un balazo cuando presenciaba una pelea

Maximiliano López sufrió una severa lesión en la cabeza al recibir tres disparos de postas de goma por un enfrentamiento ajeno, según relató. Su madre necesita ayuda para sacar adelante el hogar.

En la madrugada del 8 de junio, Maximiliano López recibió tres disparos de postas de goma, al presenciar una pelea en la madrugada, según relató. Uno de ellos le provocó la pérdida de un ojo.  
El hecho ocurrió en inmediaciones de Benito de Miguel al 700, y el chico contó que sólo recuerda haber parado a mirar los incidentes y luego se despertó en el hospital. Ahora, pelea por no perder la vista del todo y su madre lucha por sacar el hogar adelante.
“Me toca algo nuevo. Es lo que me está pasando. Por ahora la llevo más o menos. No me doy cuenta de las cosas, de lo que me está pasando”, dijo en diálogo con TeleNoticias.
De la noche del trágico hecho, afirmó que sólo recuerda algunos momentos. “Me acuerdo que salgo de un boliche, paso por otro y había quilombo. No me acuerdo si me bajé o qué y cuando miro para atrás recibo un impacto en el ojo. Justo pasaba y me frené a mirar y después no me acuerdo nada más”, dijo Maximiliano.
El chico, contó que se despertó  “en el hospital” y agregó: “ya no entendía nada. Lo único que tenía era el ojo emparchado y después de eso estuve en el hospital y me dijeron lo que me había pasado.  No me trasladaron. Tuve que salir con mi vieja que le tuvo que pedir la orden a una doctora para irme en colectivo, los pasajes. Y tuve que salir en colectivo con un proyectil en el ojo después de cuatro días. Y allá una barbaridad cómo me atendieron. Y hablo en agradecimiento a Rosa y a Romero que son los únicos que me dieron una mano en esto”, afirmó el joven.
En tanto, Laura, madre del joven relató la difícil situación que les toca vivir y buscar una explicación para lo que ocurrió esa fatídica noche. “Nosotros fuimos a contactarnos con el abogado para conocerlo, porque no teníamos abogados, lo puso mi yerno que está al tanto de todo. Como es algo raro para nosotros, él nos explicó que se iba a tardar seis meses para ver el movimiento de todo esto pero que esperáramos la ayuda de las autoridades porque no es una cosa así nomás”, afirmó la mujer.
“En este caso, Maximiliano no tenía nada que ver, amén de que  yo le digo a todo Junín y a todo el mundo. Maximiliano no es un chico distinto, tiene un montón de errores, se cría día a día, trata con su mamá de vivir una vida correcta, que hoy es muy difícil. Yo he pedido ayuda por todos lados, porque he criado sola a mis hijos para encaminarlos y que sean chicos de bien. La realidad me mandó para otro lado. Me discriminó igual que a mis hijos”, dijo Laura.
“Entonces hoy la ayuda que yo le estoy pidiendo al abogado es que soy una mamá ignorante pero que no soy tonta y que confío que me va a ayudar y que va a sacar todo como tiene que ser”, afirmó, reiterando su reclamo por justicia. 

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