Emotiva vigilia por Iván Calderón en la guardia del Hospital Abraham Piñeyro

"Tengo una banda amiga que me aguanta el corazón", dice la bandera que los amigos de Iván Calderón hicieron para alentar por la recuperación del futbolista del Club Rivadavia de Junín que está internado grave desde hace tres semanas.
El adolescente, de 18 años, apareció inconsciente en la esquina de Rivadavia y Lugones en la mañana del 13 de abril pasado, tendido junto a su motocicleta. A priori, algunos pensaron que pudo haber sufrido un accidente. Pero su familia cree que fue víctima de una golpiza.
"Iván tiene lesiones severas y graves. Unos tres golpes en ambos parietales y en la parte de atrás de la cabeza", dijo su hermana Laura Calderón, de 35 años, en diálogo con Democracia.
El futbolista, que se desempeñaba de mediocampista "que iba y venía al ataque", según describió uno de sus tíos, se encuentra internado en terapia intensiva, en coma inducido y sin respuesta de señales neurológicas.
"A veces mueve las piernas y los brazos, muy poquito, pero no despierta", contó Laura.
El miércoles pasado, los médicos le realizaron una traqueotomía, aunque Iván sigue alimentándose por sonda. También sufrió una neumonía, aunque su hermana señaló que estaba "controlada".
El último parte médico difundido anoche, establecía que Iván continuaba grave y no había sido posible realizarle una tomografía "porque está rota la cinta del tomógrafo".

La investigación

"No hay novedades de la investigación. Parece que nadie vio nada", dijo Laura, aunque tiene sus dudas sobre ello. "Para nosotros los de la parada de taxis de Rivadavia y Vuelta de Obligado saben algo, pero pensamos que por miedo no se animan a contar", afirmó.
"Pedimos que todo aquel que sepa algo, por mínimo que sea, que se acerquen. Hoy en Junín no estamos lejos de estar acá en la guardia como nosotros por la inseguridad y violencia que hay", afirmó Laura.
El fiscal Ángel Quidiello, titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N° 7 de Junín y a cargo de la causa de Iván Calderón, afirmó en diálogo con Democracia que la semana que viene continuará "el trabajo de campo relacionado a la incorporación del último informe médico y la pericia accidentológica". Además, se avanzará con la recolección de testimonios en torno al hecho y los momentos previos.
De esta manera, se espera que los investigadores cotejen ambas pericias para determinar una posible hipótesis de lo que ocurrió.
Según pudo saber este diario, hasta ahora, del informe tomado del lugar del siniestro se desprendía que había ciertas marcas en el asfalto que podían estar relacionadas a un impacto.
Aunque allegados a la víctima, habían denunciado a Democracia días atrás que, luego de trasladar a Iván Calderón del lugar donde tuvo el accidente al Hospital, las autoridades no cerraron el lugar y "tocaron todo", por lo que la escena del siniestro estaría "contaminada".