Por la “agudización de las situaciones de violencia, producto del aumento de delitos registrados en los últimos meses en Junín”, el bloque de concejales del Frente para la Victoria presentó un proyecto de ordenanza para que el departamento ejecutivo de la Municipalidad de Junín “cree en la órbita de la secretaría de Seguridad un departamento de lucha permanente contra la economía del delito”.
Además el proyecto, elaborado por el edil socialista en el FpV Juan Manuel Sequeira, estipula que esta nueva área dentro de Seguridad “se dedique exclusivamente a realizar un relevamiento catastral dinámico de los lugares donde se desarrollan las economías del delito”,
“Se deberá realizar en el término de 90 días un relevamiento dinámico de los potenciales lugares en donde se podría desarrollar la economía del delito e identificación de delitos”, sostiene la iniciativa.
Reincidencia y consumo de drogas
“Este estado de reincidencia permanente en el delito en la mayoría de los casos tiene como objetivo central el robo para luego vender lo sustraído y con el dinero obtenido, entre otros destinos, tiene uno que es muy preocupante que es la compra de distintas sustancias estupefacientes generando en este caso un círculo vicioso que es la repetición del robo para poder alimentar la adicción”, advirtió Sequeira.
Mercado “negro”
Y agregó que “todos estos objetos robados son reducidos por negocios inescrupulosos que los compran a bajo precio para luego revenderlos a precios muy superiores, alimentando a través de la economía del delito, la economía en negro”. Asimismo, el concejal afirmó que para combatir la llamada “economía del delito”, primero “se deben identificar e inspeccionar los lugares donde se desenvuelven, que muchas veces parecen negocios legales, es decir todos aquellos lugares donde pueda presumir que se vende o compra lo que se obtiene de un robo, hurto o cualquier tipo de delito que pueda tener relación o no con el narcotráfico”.
Cerca del vecino…
Para Sequeira, “el servicio de seguridad ciudadana, como todo servicio, cuanto más próximo está del ciudadano que lo recibe, siempre es menos burocrático, más eficiente y además permite que los ciudadanos y sus organizaciones por la proximidad puedan ejercer el incorruptible control social de transparencia y eficiencia en la prestación del mismo”.
“El Municipio es la organización del Estado más próxima al vecino, y que éste visualiza con claridad que es el canal más directo de participación para solucionar los problemas de todo tipo, que padece, independientemente de la competencia del problema que lo aqueja”, dijo.
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