Con la declaración de familiares y vecinos de la víctima, comenzó ayer el juicio oral por el crimen de Olga Acedo, ocurrido el 15 de marzo de 2013 en el interior de la casa donde vivía la mujer, ubicada en avenida República 170 de esta ciudad.
Los testigos recordaron los movimientos habituales de la víctima, que tenía 72 años al momento de ser hallada sin vida, pero no lograron aportar indicios reveladores sobre los acontecimientos ocurridos aquella mañana en el inmueble de la fallecida.
También se exhibió un video con la reconstrucción del hecho, realizada según los dichos del único imputado que tiene el caso, Jonathan Castro, de 23 años, que quedó implicado por una prueba de ADN que probaría no solamente su ingreso al inmueble con intenciones de robo, también como autor del hecho de sangre.
Castro –que llegó a esta instancia de juzgamiento detenido en la Unidad Penitenciaria 49- reconoció durante el proceso de instrucción haber estado en el lugar del crimen, pero dijo que no entró y que quien sí lo hizo fue Kevin Fernández, que en la actualidad tiene 19 años y que al salir aquel día del inmueble de Olga reconoció haber matado “a una vieja.”
De todas formas, Fernández y otro joven fueron excluidos de la acusación por falta de pruebas.
Por su parte, los abogados defensores de Castro, Carlos Torrens y Federico Mastropierro, ya adelantaron que tienen pensado pedir que se absuelva a su representado de la comisión del delito de homicidio.
Castro está acusado de “Homicidio en ocasión de robo” (está penado con una condena que va de los 8 a los 25 años de prisión) y es juzgado por el tribunal Oral en lo Criminal Nº1, integrado por Karina Piegari, Miguel Ángel Vilaseca y Esteban Melilli. La parte acusatoria está personificada en el fiscal José Elías Alvite Galante.
El juicio continúa hoy, a partir de las 10, en el cuarto piso de Tribunales. Se espera la declaración de más testigos, mientras que los alegatos quedarían para la semana que viene.
Olga Aída Acedo fue asesinada cuando estaba cuidando a su sobrina nieta que por entonces tenía dos años.
A las 9.30 de dicho día, Florencia (23 años y maestra integradora en la Escuela de Educación Especial N° 501 de la ciudad de Junín) dejó su hija al cuidado de Olga y cuando regresó a la vivienda a las 12.30, la docente encontró a la septuegenaria degollada, mientras que la niña resultó ilesa en el hecho.
Florencia avisó a la Policía y los efectivos de la DDI, Policía Científica y personal de los grupos GAD y Geof, y apenas arribaron a la escena del crimen secuestraron una cuchilla.
Una hipótesis arrojó la prueba de que a un delincuente entró a la propiedad luego de romper la claraboya que da lugar al baño, con sólo 35 centímetros de diámetro y desde allí se descolgó con una soga y le abrió la puerta al cómplice. El 17 de marzo de 2013, el personal de la DDI Junín detuvo a Jonathan Castro. El 16 de mayo el Juzgado de Garantías confirmó el procesamiento a prisión preventiva contra Castro y el 28 de junio el personal policial y judicial reconstruyeron la escena del crimen como parte de la investigación.
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