“Nosotros les agradecemos que vengan porque éste es un barrio olvidado, nadie se acerca por acá”. De esta manera, Horacio Nedef, presidente de la sociedad de fomento de Progreso, da la bienvenida al equipo de Democracia y TeleJunín.
Es que los vecinos de este sector ubicado al oeste de la ciudad y delimitado por las calles Dr. Possio, Lugones, José Hernández y Camino del Resero advierten que sus constantes reclamos por mejoras en la infraestructura, no son escuchados por las autoridades.
Entre las demandas más urgentes, se destacan obras en el alumbrado público, cloacas, gas natural, arreglo de calles, desmalezamiento y seguridad.
Servicios
Hoy todo el sector cuenta con agua corriente, mientras que un 60% tiene cloacas, quedando pendiente el área que rodea a las calles Camino del Resero y Del Valle Iberlucea.
El vicepresidente de la sociedad de fomento, Sandro Anaya, explica que “días pasados se hizo un reclamo en Obras Sanitarias y la respuesta es siempre la misma: se pasaron los presupuestos pero todavía no han llegado”.
También hay quejas por el estado de las calles. El cordón cuneta cubre ocho de las doce manzanas, pero eso no es suficiente para que se pueda circular con normalidad. “Hay sectores en los que el cordón cuneta no se ve porque lo tapa la tierra –comenta Nedef– entonces el agua no corre sino que se va para la calle y se forman las ‘cortadas’. Por eso pedimos que pasen las máquinas”.
Gas y alumbrado
La red de gas natural aún no llegó a este lugar, y el tema resulta de vital importancia para los lugareños. Nedef recuerda que “dijeron que en el transcurso de 2014 iba a llegar”, algo que aún no sucedió: “Esperemos que en 2015 sí se cumpla esta promesa. No sabemos dónde se traba ese tema, aparentemente tiene que venir de otros barrios primero, pero es algo que está trabado”.
Asimismo, el presidente de la sociedad de fomento subraya algunas deficiencias en el alumbrado público, aseverando que “hay días en los que está bien y hay semanas en las que no hay servicio”. Y profundiza: “A lo mejor tenemos luz esta noche y mañana no. En otras oportunidades nos han dicho que esto es por la gran demanda”.
Además, Anaya hace referencia a otra dificultad en la electricidad domiciliaria: “Tenemos mucha gente con ese problema en las casas, a algunos les hicieron la bajada, de manera legal, desde la línea de la calle, entonces cuando no hay luz en las calles, tampoco hay en las casas. Nosotros reclamamos y acá no aparece nadie. No hay respuestas”.
Otros temas
El vicepresidente de la entidad barrial también vuelve a reclamar por las condiciones en que se encuentra un gran lote ubicado detrás del Velódromo. Se trata de una demanda reiterada en el tiempo: “Hay un verdadero basural y es, en realidad, un lugar para que la gente se esconda. Hemos ido a reclamar y la respuesta es siempre la misma: que las máquinas están rotas, o que son chicas, o que el municipio no tiene fondos. Hace poco se metieron ahí y robaron a una familia, golpeando a la mujer y cortando con un cuchillo al hombre, porque es un pastizal terrible”.
A propósito de la inseguridad, Nedef señala que en este sector la sufren “como en toda la ciudad”, y es por ello que hacen hincapié “en el tema de la oscuridad”.
Con todo, a este aspecto se suma la decisión de los taxistas de no ir de noche a esta zona de la ciudad por temor a los robos. En este sentido, Anaya señala: “Hemos tenido conocimiento de que algunos casos han pasado y hoy por hoy los taxis no entran de noche a este barrio”. Por lo tanto, a los vecinos de la zona se les hace muy difícil movilizarse, sin transporte público y sin taxis. “Sobre todo teniendo en cuenta que se produjeron también algunos hechos contra motos, a personas que las han tirado o les han arrancado la cartera”, concluye Anaya.
Progreso: “Este es un sector olvidado”
Los vecinos advierten que sus reclamos por mejoras en la infraestructura no son escuchados por las autoridades. Piden trabajos en el alumbrado público, cloacas, gas natural, arreglo de calles, desmalezamiento y seguridad.
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