La zona céntrica y Pueblo Nuevo, jaqueados por el accionar de los motochorros

Los robos a manos de motochorros no sólo siguen en aumento sino que en los últimos meses parecen haberse concentrado en dos zonas puntuales de la Ciudad: la zona céntrica –especialmente en el perímetro comprendido entre Lavalle, Francia, Paraguay y Guido Spano– y Pueblo Nuevo. Si bien la primera ya estaba consolidada como el escenario preferido de los arrebatadores, en este último tiempo, el segundo barrio emergió como lugar de acción.
Así se ve reflejado en un mapa de los arrebatos que realizó Democracia, a partir de un relevamiento propio, con los hechos que se registraron en los últimos meses de este año.
Ejemplo de esta tendencia son los hechos que tuvieron lugar el pasado 15 de noviembre. El primero, alrededor de las 10 en Juan Bautista Alberdi y Guido Spano, cuando una mujer fue abordada por un motochorro que le sustrajo una cartera marrón en la cual llevaba tarjetas de crédito, documentos, algo de dinero y efectos personales.
Ese mismo día, cerca de las 13, en Almafuerte casi Guido Spano, una jubilada fue violentamente despojada de su cartera por otro solitario delincuente a bordo de una moto, quien hizo caer al piso a la septuagenaria damnificada, quien sufrió algunas lesiones, leves por fortuna.
Mientras tanto, en Pueblo Nuevo, la calle Newbery parece estar a merced de los arrebatadores. Es que allí, el 8 de octubre pasado, a la altura del 200 de esa arteria un motochorro tironeó de la cartera de una mujer hasta arrancársela. Un día antes, también en Newbery, a la altura de Quintana, otra vecina fue víctima de los delincuentes. A las víctimas en esa zona debe sumárseles además un grupo de estudiantes que caminaban por inmediaciones del Conservatorio de Música y fueron sorprendidos por los malhechores.
Como viene se viene informando, en el mapa general de Junín las zonas coinciden con los sectores con más hechos delictivos que fueron señalados por el Observatorio de Seguridad Ciudadana local, que fueron dados a conocer en este medio en su edición del sábado 26 de julio. Salvo que a diferencia de la última actualización del mapa de los arrebatos, Pueblo Nuevo es la novedad.
Según pudo saber Democracia, una costumbre de los delincuentes que acechan sobre Newbery es fugarse de contramano y aprovechar el paso a nivel de Rivadavia. No sólo pierden de vista fácilmente a la policía, sino que cambian de jurisdicción, lo que entorpece aún más su captura.

Preocupación de las autoridades

El propio secretario de Seguridad de la Municipalidad, Víctor Knappe, reconoció que los arrebatos y los escruches –robos en casas vacías– son la principal preocupación del Ejecutivo en materia delictiva.
Y para la Policía también. Tal es así que, como informó de manera exclusiva este diario a principio de mes, la Jefatura Distrital de Junín anunció la creación de una división motorizada. La brigada, que incorporará unas veinte motocicletas de alta cilindrada, tendrá como principal objetivo disuadir el accionar de los motochorros y las picadas ilegales. Para ello, los uniformados realizan una capacitación especializada en el autódromo Eusebio Marcilla y se espera que salgan a la calle el próximo mes.

Datos oficiales

Para las estadísticas oficiales, la zona más insegura de la ciudad, es el denominado  “sector IV”, delimitado por Circunvalación, Bartolomé Mitre, Rivadavia, Javier Muñíz y Ramón Hernández, y Ruta Nacional 7. Lo que en parte coincide con la zona del macrocentro donde los motochorros concentran su accionar. Allí, además de haber hechos de todo tipo, los arrebatos –muchos de ellos perpetrados por “motochorros”– son moneda corriente.
Durante el transcurso del año, las manzanas más castigadas fueron las que están en inmediaciones de Benito de Miguel, Rivadavia, entre Jean Jaures y Siria; Pastor Bauman, entre Benito de Miguel y Malvinas Argentinas; General Paz, entre Libertad y Padre Ghío; y Padre Ghío y Azcuénaga. El botín de los delincuentes es otro de los aspectos que permite establecer un perfil de las modalidades delictivas predominantes.