Salto, comedia trágica en alta mar cuenta el naufragio de Rita, una reconocida cantante del crucero Splendid quien se ha arrojado al mar a bordo de un bote salvavidas en busca de una vida menos superflua y más real.
En un bote a la deriva se suceden los días, los ciclos y estados que atraviesa, sumado a la impredecible realidad circundante. Rita quiso trascender, dar un salto.
La protagonista es Mercedes Hernández, quien ha sido la clown nada menos que del espectáculo Varekai del Cirque du Soleil y realizado la gira por Europa, Asia y Sudamérica.
-Estás presentando Salto, comedia trágica en alta mar, ¿de qué se trata? ¿por qué elegiste esta obra?
-La obra retrata el naufragio de Rita, una reconocida cantante del crucero Splendid que decide dar un salto, abandonando el barco en el que trabaja y arrojándose al mar a bordo de un bote salvavidas en busca de una vida menos superflua. Elegí hacer esta obra porque me interesa hablar de la valentía de tomar las decisiones que nos acercan a nuestros sueños y nos liberan de nuestras trabas.
-¿Qué te pidieron Luisina Di Chenna y María Florencia Álvarez?
-Las directoras Luisina Di Chenna y María Florencia Álvarez me pidieron que me sumerja en la búsqueda de esta obra desde un lugar verdadero, y así logramos construir el universo de este personaje y la historia que relata la obra. También nos propusimos profundizar en la actuación, partiendo de mi experiencia como clown pero dirigiéndonos a lugares más profundos, dramáticos y emotivos, para enriquecer el trabajo y que la obra presentara diferentes matices y propuestas, desde mi trabajo como actriz, desde la dirección y desde la dramaturgia.
-¿Cómo llegaste al Cirque du Soleil y qué te significó estar en el elenco de Varekai?
-Al Cirque du Soleil llegué a partir de un casting que se realizó en Buenos Aires en 2008. En realidad llegué primero a través de un video que presentó un amigo con el que yo trabajaba, y ahí hicieron una primera selección, invitándome a participar del casting. Luego audicioné durante dos días y un año más tarde me contactaron para que viaje a Montreal a entrenar e incorporarme en el elenco de Varekai. El trabajo en el Soleil me significó muchísimo crecimiento profesional, me permitió conocer el mundo desde otro lugar, y también revalorizar la escena artística de nuestro país, en la que encontramos un gran nivel cultural.
-¿Qué es un clown y qué un payaso?
-Existe una técnica teatral que fue denominada clown, y toma los principios del arte de la payasada. Esta técnica se trabaja desde un lugar de entrenamiento actoral e invita a los artistas a desempeñarse en la comicidad en ámbitos más teatrales. Este término es la traducción exacta al inglés de la palabra "payaso". En nuestro país, donde las dos palabras toman diferentes sentidos, cuando decimos payaso, en general nos referimos más a los payasos de circo tradicional o a los payasos que se desempeñan en el ámbito callejero. Pero yo creo que todos, ya sea en el circo, en el teatro, en la calle o en el cine, somos payasos que decidimos encarar nuestra tarea desde un lugar de juego y comicidad.
-Tu trayectoria como clown es muy extensa, y has pasado por muchas obras y escenarios del mundo, ¿qué le pasa a un artista cuando se coloca la nariz roja?
-Cuando un artista se "coloca la nariz roja", o decide enfrentarse a un público desde el lugar del clown (que no siempre lleva esa nariz), tiene la posibilidad de encontrarse con ese público desde la verdad, la empatía, la risa y el juego. Es muy gratificante poder generar la risa o la emoción en el otro, y más cuando es a través de la identificación que siente al público al ver la humanidad y simpleza del payaso.
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