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LA PROVINCIA / PANORAMA DE LA SEMANA

Discurso más filoso y temores en el oficialismo

“Me dijeron que nos tienen que ver juntos”. La frase que habría soltado el ministro de Economía Axel Kicillof durante un reciente encuentro con Daniel Scioli, fue interpretada cerca del mandatario como una señal de la Casa Rosada.
El Gobernador busca que el kirchnerismo se convenza de que él es el mejor candidato que puede ofrecer el oficialismo para las elecciones del año próximo. Y aquella definición del poderoso ministro de Cristina Fernández fue leída en el sciolismo como un indicio esperanzador.
Quizás haya sido el motivo por el que el propio Scioli resolvió en los últimos días endurecer su discurso. Dejó, al menos por el momento, la idea de la “continuidad con cambios” para virar hacia una posición más dura contra la oposición. Más cercana, además, a la prédica K.
En el oficialismo bonaerense se habla por estas horas de ese viraje dialéctico al que se subió incluso la esposa del Gobernador. Karina Rabolini viene recorriendo el país para apuntalar el proyecto presidencial Scioli 2015 y, desde Córdoba, acusó a la oposición se sembrar “miedo”.
Pero en las filas del peronismo provincial se sigue con atención ese supuesto acercamiento. Hay dirigentes que sospechan que si finalmente llegara ese aval oficial al Gobernador, la Casa Rosada se reservaría el manejo prácticamente absoluto de las listas de candidatos.
Ya se habla, por caso, de que el posible candidato a gobernador tendría la bendición de la Presidenta. Los nombres que más suenan son el titular de la Anses, Diego Bossio, y el intendente de Berazategui, Patricio Mussi. El presidente del PJ bonaerense y alcalde de la poderosa La Matanza, Fernando Espinoza, también aspira a quedarse con ese galardón. Pero distintas versiones ya lo bajan un escalón para ubicarlo como posible vice en esa fórmula.
Acaso lo que ocurrió el jueves en la Legislatura puede que sea un anticipo de lo que se venga con el diseño de las listas de legisladores nacionales y provinciales y la conformación del binomio para la Gobernación en el Frente para la Victoria.

“Lo pidió Máximo”

Ese día, el oficialismo debía designar su representante por la Cámara de Diputados para el Consejo de la Magistratura. Dicen que se había avanzada en un acuerdo para designar a Nelson Silva Alpa, un legislador que responde al ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo.
Pero cuando todo parecía encaminado para que el randazzismo consiguiera ese preciado espacio, los sectores ultra K del bloque de diputados forzaron un cambio. “Lo pidió Máximo”, fue la frase a modo de argumento, según reconocen diversas fuentes legislativas, que surgió para bajar a Silva Alpa y encaramar en el cargo a Lucía Portos, una camporista que responde al “Cuervo” Larroque, uno de los dirigentes de extrema confianza del hijo de la Presidenta.
Para no pocos observadores, la derrota del randazzismo en esta puja legislativa quizá sea la aceituna del vermut que se prepara en el FpV cuando llegue el momento de anotar candidatos.

Intendentes en pie de guerra

“Nos tiran este proyecto en el momento menos oportuno, cuando hay que debatir el Presupuesto”. La reflexión de una senadora bonaerense del oficialismo refiere a la polémica reforma a la ley municipal para instaurar negociaciones paritarias para los empleados de las comunas.
La norma establece límites a la cantidad de contratados que pueden tener los municipios y un piso salarial que, para muchos alcaldes, es de imposible cumplimiento. “Vamos a tener que dejar de prestar servicios”, alertan en medio de las presiones de sectores sindicales para que se avance con la normativa.
“Se nos va a duplicar la masa salarial”, señalan.
Dispuestos a que el proyecto no avance, varios de los alcaldes iniciaron gestiones para reunirse con Scioli y trasladarán sus inquietudes a los bloques opositores del Frente Renovador y la UCR.
La cuestión es polémica y tiene diversas aristas. “Nos dicen que se aprobó en Diputados por una orden de arriba, pero nadie nos dice quién la dio”, decía en las últimas horas uno de los intendentes que busca ponerle el freno al proyecto.
Pero en la vereda de enfrente están los justos reclamos de miles de municipales que, en muchos distritos, pasan años como contratados  sin chances de pasar a la planta permanente y cobrando sueldos bajísimos.

Gestiones y campaña

Mientras tanto, el sciolismo se apresta a comenzar con la oposición el debate por el Presupuesto 2015 y la ley Impositiva. Si bien el primer encuentro formal entre algunos ministros y legisladores será el martes, ya habrían existido algunos contactos tendientes a conseguir el respaldo opositor, al menos, para la aprobación del aumento del impuesto Inmobiliario Urbano y Rural previsto en el proyecto.
Ya se habla de que el Ejecutivo estaría dispuesto a dar marcha atrás con algunas de las iniciativas incluidas en esa norma como el cobro de Ingresos Brutos a las ventas minoristas que realizan las cooperativas, operatoria ahora exenta. Sería en un gesto hacia sectores de la oposición que resisten esa medida.
Para el gobierno bonaerense, se trata del último debate legislativo fuerte del año antes del inicio de una etapa que considera clave para las aspiraciones presidenciales de Scioli: la temporada de verano.
Habrá un apuesta fuerte a captar la atención de los turistas, obviamente, como la presencia del Gobernador. Se habla de varias movidas públicas y actividades novedosas.
En las últimas horas trascendió incluso que se estaría evaluando en el comando de campaña sciolista la posibilidad de instalar en Mar del Plata un parque de diversiones gratuito con el tradicional tono naranja que identifica al proyecto presidencial.
La interna del FpV arrojó en las últimas horas, además, otro dato: el retorno de Randazzo a los actos del peronismo. Y no pasó desapercibido: entre críticas a la oposición y respaldos al Gobierno nacional, ratificó en el cónclave desarrollado en Moreno que será candidato a presidente en las Primarias. 

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