None
COMPARACIÓN INTERANUAL 2012-2011

Se incrementó casi un 50 por ciento la habilitación de comercios en Junín

Seis de cada diez nuevos negocios corresponden al rubro minorista, que de esa forma se convierte en el sector con más crecimiento hasta diciembre del año pasado. Sin embargo, a muchos de los que abren les cuesta sostenerse y terminan cerrando al poco tiempo.

Entre enero y diciembre de 2012 fue habilitado en Junín un 50 por ciento más de comercios que en 2011, según lo refleja una estadística del gobierno local a la que tuvo acceso DEMOCRACIA.  
El informe indica que, en general, la cantidad de negocios que se registraron y empezaron a trabajar en la ciudad superó en un 62,5% a la del calendario precedente, y si se segmenta la comparación al sector comercial, el crecimiento interanual trepó al 49 por ciento. De ese universo, seis de cada diez negocios nuevos pertenecen al rubro minorista.
En segundo lugar se encuentra el sector Servicios, con el 24 % de las altas, siempre de acuerdo con las cifras que maneja la Dirección de Producción de la Municipalidad de Junín.
Oscar Palma, a cargo de esa área comunal, señaló que “dentro del rubro comercio, los sub rubros que más altas registraron fueron, en primer lugar, el sector alimentos y en segundo orden el de indumentaria”.

Los que cierran…

Las cifras que maneja el Municipio aluden a las firmas que se incorporan al mercado laboral, pero no hay datos sobre aquellas compañías y puntos de venta que han tenido que bajar las persianas al no poder subsistir o, incluso, no poder recuperar la inversión que pocos meses atrás habían realizado para invertir en su proyecto.
Esa madeja de complicaciones fue graficada por la tesorera de la Cámara de Pequeñas y Medianas Empresas del Noroeste Bonaerense (Capynoba), Gladys Hilgert, al indicar que buena parte de la gente que se insertó en la rama comercial decidió bajarse de esa aventura a los pocos meses y con una sensación inequívoca de trago amargo a cuestas.
“La gente abre negocios, sobre todo destinados a la venta de ropa, pero no hay continuidad. Es decir, el problema es que esos emprendimientos no son rentables y terminan cerrando al poco tiempo de haber inaugurado el local. Lo mismo pasa con las zapaterías, hay lugares que tienen menos de un año de antigüedad y ya están retirando la mercadería porque no van a seguir”, señaló la dirigente.
Hilgert habló del panorama general que afecta a los comercios juninenses en la actualidad y puntualizó que en el centro de la ciudad es donde más se percibe la dificultad de los vendedores para no perder el brillo y el color de sus vidrieras. “Yo lamento muchísimo esto, porque la gente tiene una esperanza y ganas de trabajar, entonces junta un dinero y apuesta a un negocio pensando que con eso va a salir adelante. Pero hay que tener mucha espalda para aguantar un desafió de ese nivel, porque aparte hay que prever que se debe contar con un menú surtido de productos para satisfacer a un cliente cada vez más delicado, que quiere calidad, cantidad y a buen precio”, comentó.
La representante de Capynoba agregó que otro de los detalles a tener en cuenta es que quienes tienen la posibilidad de concretar ventas, en buena proporción no reciben entrada en efectivo porque las operaciones se concretan con tarjetas de crédito, en cuotas, entonces el dinero que les queda al momento de la transacción “es relativo”.
“Una de las cosas por las que no es tan fácil mantenerse en el tiempo es la falta del sistema que permite el abono con tarjetas. Hoy el cliente busca mucho eso”, opinó Hilgert.

La mudanza por los alquileres

Excluyendo a quienes ya se ven a condenados al cierre y lo ejecutan sin ánimo de darse una segunda oportunidad, un contratiempo que suele presentársele a los propietarios de negocios es el de tener que cambiar el domicilio y la dimensión del inmueble para achicar gastos en concepto de alquiler, sobre todo si la sede en que se encuentran está ubicada en el centro de la ciudad.
“Los alquileres están carísimos”, expresó Gladys Hilgert, quien acotó que mantener un negocio abierto con todos los impuestos al día, con el salario de los empleados, con la rotación de la mercadería y demás “no es tan fácil”.
Más adelante sostuvo que “es casi imposible revertir la situación sin un espaldarazo de la política nacional” y vaticinó un “año mucho más duro”. “Hoy, antes de abrir un negocio nuevo, me parece que lo pienso dos veces”, expresó. 

COMENTARIOS