Carlos Fuentes: El escritor mexicano murió a los 83 años

El escritor Carlos Fuentes murió ayer los 83 años en el hospital Ángeles del Pedregal de México como consecuencia de problemas cardíacos, según informaron los familiares a la prensa mexicana.
El talentoso y reconocido escritor estuvo el pasado 5 de mayo en Argentina para participar en la Feria del Libro, en la que presentó su último libro, La gran novela latinoamericana.
"El gran desafío de la novela actual es el de dar los tiempos de la simultaneidad, dejar atrás la muy simple y cómoda linealidad", expresó Fuentes hace días en la Feria del Libro de Buenos Aires.
El escritor, de impecable traje azul y camisa, quien fue aplaudido de pie ni bien ingresó a la sala, se refirió en la charla a su "herencia mexicana literaria", al periodismo, a la cultura, a la lengua española y a los exponentes literarios más destacados de América latina.
"Me siento contento de estar de vuelta en Buenos Aires. La ciudad de mi juventud, de mis amores y de mi vida", dijo el escritor de 83 años, hijo de diplomáticos, quien residió algunos años en la Argentina.
Por su parte el presidente de México, Felipe Calderón, expresó sus condolencias en su cuenta de twitter oficial: "Lamento profundamente el fallecimiento de nuestro querido y admirado Carlos Fuentes, escritor y mexicano universal. Descanse en paz".
El director de la Real Academia Española, José Manuel Blecua, también se se sumó a la despedida de Fuentes asegurando que la muerte del escritor mexicano supone "la pérdida de una figura irreemplazable".

Su vida, su obra

Nacido en ciudad de Panamá en 1928 (hijo de un diplomático mexicano), Fuentes fue autor de más de 20 novelas y contaba entre otros con el Premio Cervantes (1987) y el Príncipe de Asturias (1994), ambos en España. También obtuvo el Premio Rómulo Gallegos en 1987.
El escritor fue el gestor de novelas bestsellers, como La región más transparente, La muerte de Artemio Cruz, Cambio de piel o Terra nostra. Durante su obra tuvo el afán de desvelar los "misterios del alma mexicana".

El cine, su otra pasión

Fuentes era un gran aficionado al cine. Su talento y capacidad le permitieron escribir guiones para varias películas, como Las dos Elenas, un filme corto basado en su cuento; El gallo de oro (1964, junto con Gabriel García Márquez y el director de la película Roberto Gavaldón), Un alma pura (1965), Tiempo de morir (1966, junto con Gabriel García Márquez), Pedro Páramo (adaptación de la novela de Juan Rulfo, con Carlos Velo, director, y Manuel Barbachano Ponce, 1967), Ignacio (también adaptado de un cuento de Juan Rulfo, 1975).
Su novela La cabeza de la hidra fue llevada a la pantalla grande en 1981 por el director mexicano Paul Leduc con el título de Complot Petróleo: La cabeza de la hidra guionada por él.