NEGOCIOS AGROPECUARIOS

Campo-Estado: la cuestión es el diálogo

El gobernador bonaerense y candidato presidencial por el Frente para la Victoria, Daniel Scioli, tiene previsto profundizar el diálogo con la cúpula de las entidades agropecuarias si triunfa en los comicios de octubre.
Así lo confirmó en declaraciones a Noticias Argentinas, el ministro de Asuntos Agrarios bonaerense, Alejandro "Topo" Rodríguez, uno de los posibles candidatos a suceder a Carlos Casamiquela en el Ministerio de Agricultura, si Scioli gana las elecciones.
No obstante, Rodríguez aseguró que en la coyuntura ninguno en el equipo de Scioli piensa en cargos y que su gestión en Asuntos Agrarios se sustentó en el diálogo con el sector agropecuario: ¿por qué habría de cambiar eso en una hipotética gestión en el gabinete nacional?
Por múltiples razones, se le dijo, entre ellas que la Mesa de Enlace ahora con tres patas ante la huida hacia el Ministerio de Economía con Axel Kicillof como interlocutor de la Federación Agraria (FAA), está vista como el enemigo por el oficialismo.
En ese sentido, si bien Scioli el último jueves estuvo media hora con la Comisión Agropecuaria bonaerense y le prometió varias soluciones para paliar la situación dejada por las inundaciones en la provincia, distinto sería recibir a las cabezas de las entidades como presidente de los argentinos.
A la Mesa bonaerense, salvo el presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP), Horacio Salaverri, concurren sólo representantes de las entidades en conflicto con el Gobierno, como son la Sociedad Rural Argentina (SRA), Coninagro y FAA con la que no hay problema.
El inexistente diálogo entre el Gobierno y las cabezas de las entidades gremiales del campo es un tema que tiene mucha tela para cortar cuando se piensa que países agro exportadores como Estados Unidos, Brasil, Uruguay y Paraguay, entre varios actúan de otra manera totalmente distinta con entendimiento entre productores y Estado.
De todos modos, Rodríguez no se cansa de señalar que Scioli tiene voluntad de diálogo con el campo.
En tanto, aclaró a NA que en "la provincia de Buenos Aires, la política agropecuaria se implementa con diálogo, ese diálogo es institucionalizado que como se ve tiene una Mesa agropecuaria que puede tener y afortunadamente lo tiene distinta visión, distintos criterios y el estilo de trabajo de Scioli ha sido caracterizado o atravesado por el diálogo con todos los sectores".
"En ese sentido, yo siempre soy optimista respecto de seguir siempre con más diálogo y obviamente también con una agenda de trabajo", afirmó.
Sin embargo, cuando Abel Guerrieri, representante de la Sociedad Rural Argentina (SRA) ante la Mesa de Enlace agropecuaria de la provincia de Buenos Aires, le preguntó a Scioli si, en caso de llegar a la Presidencia, pensaba seguir con los encuentros con el campo, el gobernador bonaerense eludió la respuesta.
Scioli le dijo que no era el momento para hablar de cuestiones políticas y que anteponía los temas técnicos, a pesar de agradecer la presencia, que valoraba especialmente, de los dirigentes ruralistas.
El ministro Rodríguez agregó: "Nosotros siempre estamos atentos a las reflexiones, a los pedidos, a ver cuáles son las necesidades de la agenda permanente y en ese sentido es una práctica que el diálogo con el sector agropecuario, trae siempre pedidos, solicitudes y también nuevos proyectos".
Eso fue un jueves, al día siguiente, el viernes, Rodríguez se mostró irritado porque tal como fue anunciado por Coninagro, la SRA y CRA, de la Comisión de Enlace de Entidades Agropecuarias, a las cero horas del lunes 24 de agosto estaba fijado el cese de comercialización del agro con finalización a las 24:00 del viernes 28 de agosto, aunque en la práctica con el fin de semana a continuación seguirá hasta el 30.
"Como mínimo, la medida es inoportuna y equivocada", enfatizó Rodríguez, quien advirtió: "nosotros no necesitamos que nadie nos diga que está pasando con los pequeños y medianos productores".
La medida de fuerza abarca la comercialización de granos y de todo tipo de ganado en pie, mientras que quedan excluidas del cese las producciones de las zonas afectadas por las inundaciones, y la comercialización de productos perecederos.
"Esta acción gremial busca poner en evidencia la crítica situación económica que atraviesan todas las producciones agropecuarias del país, que el Gobierno Nacional sigue sin resolver", sostuvieron las entidades que están presionadas por la situación del NOA y NEA donde las asambleas y piquetes no tienen interrupción.
Tan grave es la crisis que también el jueves, 350 presidentes y dirigentes de cúpula de todo el país que representan a 220 entidades y 28 complejos productivos se juntaron en un plenario de CAME y manifestaron la necesidad de que se declare la emergencia de las economías regionales.
Así productores en estado de alerta y movilización en todo el país debatieron sobre la crítica situación que enfrentan las economías regionales y delinearon las acciones a seguir en procura de la búsqueda de rentabilidad, hoy ausente en el sector, y lo hicieron a pocas cuadras de la Casa de Gobierno en Plaza de Mayo.
"Necesitamos financiación y previsibilidad ahora, estamos enfrentando un desastre agropecuario, no nos alcanza ni para pagar el flete", indicó Federico Gardea de la Cámara de Industriales Arroceros de Entre Ríos.
Mientras tanto el diálogo en grande aguarda su turno, porque como dice una definición se trata de un intercambio de ideas entre interlocutores con vistas a lograr un "acuerdo".

COMENTARIOS