Ante la actual crisis económica y la pérdida de poder adquisitivo, cada vez más familias deciden participar de las ferias vecinales que se realizan al aire libre en distintos puntos de la ciudad. Así, a la de la conocida feria de calle Alvear, ubicada en inmediaciones del Centro Comunitario, se sumó, desde hace varias semanas, la de la plaza Sarmiento en el barrio Belgrano.
Allí, todos los martes y sábados desde las 9 hasta las 21 aproximadamente, más de 70 puestos de comidas, indumentaria, accesorios y artículos de bazar venden e intercambian sus productos. Son productos tanto usados como nuevos y se ofrecen a precios populares.
"Antes se llamaba trueque y ahora es una feria donde cada uno puede traer ropa o alimentos para intercambiar o vender por poco dinero", explicaron los vecinos a Democracia y aseguraron que "hay prendas de vestir desde $500 pesos".
De esta manera, la feria de la plaza Sarmiento, que comenzó con algunos puestos de ropa usada, hoy se transformó en un espacio colmado de familias que no sólo van en búsqueda de productos accesibles, sino también de pasar una linda tarde con amigos donde el mate y la música no faltan.
Así, semana tras semana, son muchos los vecinos que se acercan para formar parte de la feria y vender así artículos que ya no utilizan en sus hogares.
"Es la primera vez que venimos a la plaza Sarmiento, también participamos de la de Alvear. Lo que hacemos es buscar en casa la ropa en buen estado que ya no usamos y la ofrecemos a precios muy bajos", contaron dos hermanas y agregaron "también buscamos en la biblioteca que tenemos, los libros que se repiten o ya no leemos los traemos para que otras personas los puedan aprovechar".
Feria histórica
La popular feria de calle Alvear del barrio Bicentenario funciona desde hace varios años. En la misma se intercambia, compra y vende mercadería como ropa, calzados, frazadas (nuevo o usado) y comida casera. El encuentro de vecinos de Junín se realiza sobre la avenida en inmediaciones del Centro Comunitario. Allí, la gente ofrece sus productos al aire libre en un ambiente familiar.
“Podemos ofrecer todo tipo de mercadería como ropa, calzado, bijouterie, frazadas, tortas fritas, buñuelos o prepizzas o lo que se ocurra que necesites vender”, informaron y añadieron: “Hay gente que ha cerrado algún negocio y trae la ropa a la feria. Esto también nos sirve para hablar sobre la situación que estamos viviendo. El que no puede comprar una ropa nueva viene hasta acá”.
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