Silvio De Gracia, artista juninense.
Silvio De Gracia, artista juninense.
FUNDADOR DE HOTEL DADÁ

Silvio De Gracia: “Me interesa cubrir todos los aspectos en el mundo del arte”

En su multifacética carrera, trabaja desde hace muchos años con la escritura, la curaduría y las artes visuales. Es un performer apasionado del arte contemporáneo con alcance internacional, que crea nuevos conceptos y deja su huella con reflexiones teóricas.

Su carrera es extensa y notoriamente imbuida por el arte en sus distintas expresiones. Crea, teoriza y reflexiona sobre el campo, y ha llegado con sus proyectos a varios países.

Junto a su mujer, Ana Montenegro, también artista y curadora, dirige Hotel Dadá, el sello editorial y galería de arte de la ciudad, la única de su tipo en Argentina y que ha recibido a artistas de distintos rincones del mundo.

La literatura, el hilo de su historia

En las páginas está su punto de partida, su presente y su futuro. Desde los 8 años, escribe cuentos, novelas y poesías y, a pesar de que el grueso de su producción aún no vio la luz, lleva publicados 3 libros: “Habitación vacía”, de cuentos, “Borrachera” y “Resaca”, de poemas.

“Actualmente sigo escribiendo. Tengo 9 novelas terminadas”, explicó el artista que, por ahora, se aboca a otros lenguajes para expresarse. 

Pero no siempre fue así. A fines de los noventa, editó la revista Ácido, que se distribuyó en la ciudad y se expandió rápidamente. “Era una publicación diferente para Junín, había revistas literarias, pero Ácido no era poesía convencional. Lo que publicaba era muy potente, como Bukowski y Baudelaire”, detalló el artista, que aún guarda algunos ejemplares en su biblioteca.

El punto de quiebre llegó con el cambio de milenio y una nueva etapa inaugurada en su vida. “En un momento, la literatura ya no me pareció suficiente para transmitir mis ideas e intereses, por eso me desplacé a las artes visuales”, señaló. Así, se introdujo en la pintura y, tras un breve paso por la Escuela Xul Solar, se especializó en la performance, su lenguaje predilecto en el mundo del arte. 

“El performance tiene mucha implicación del cuerpo y eso es lo que yo buscaba. No quería sólo involucrarme con las palabras”, explicó.

Artista contemporáneo

Del campo de la literatura tradicional llegó al arte contemporáneo y lo no convencional, el espacio donde lo hizo todo. 

En particular, son la performance y la poesía experimental los fuertes de su carrera, y en los que Silvio ha tenido mayor desarrollo, con iniciativas y proyectos propios.

Es que se siente cómodo en la experimentación artística y ha dado lugar a propuestas novedosas, incluso con incursiones importantes en el videoarte. “Se pueden conjugar. La poesía experimental puede trabajarse en video y también se puede hacer poesía performática”, explicó Silvio, que no encuentra barreras al momento de crear.

En dicho sentido, hace casi 2 décadas, elaboró un concepto propio de performance, “Interferencias”, disconforme con el estado de la disciplina en el campo. “La performance está muy aburguesada, forma parte de una cultura del espectáculo y está fagocitada por el sistema”, lamentó el artista, cuyo concepto radica en intervenir en el espacio público, interactuar con el contexto e interpelar a los espectadores.

Lo que Silvio concibe como performance es, en sí, disruptivo. Él la describe como “estética de la perturbación” porque, al realizarse sin previo aviso y sin contar con un público más que los transeúntes, la idea es “alterar la cotidianidad y generar extrañeza e inquietud”.

Al día de hoy, lleva más de 20 “Interferencias” realizadas. “Es mi propio género y visión de la performance, voy a continuar con eso”, afirmó. 

Por su parte, el artista también tiene un amplio recorrido en el arte correo, un movimiento que se funda en el intercambio postal de obras y publicaciones. En ese caso, hace una evaluación similar, puesto que aquello que solía ser una expresión fuera del mercado y los circuitos tradicionales, de índole político y vinculado a la resistencia, ha sido integrada al sistema. “Hoy el arte correo se agotó, grandes museos organizan muestras, pero no tiene el peso político y crítico que solía tener”, lamentó De Gracia.

Sin dudas, el desplazamiento de la carta al e-mail ha colaborado también en reducir su impacto e institucionalizarlo.

Hotel Dadá, su proyecto de vida

“Hotel Dadá” engloba a una porción muy importante de la carrera de Silvio. El proyecto comenzó en 2002 con el lanzamiento de una revista, que tuvo 20 ediciones en 20 años. El eje estuvo puesto en la poesía experimental y el sistema de arte correo.

“Se trata de intercambiar publicaciones a través del medio postal, y la revista tuvo mucha difusión gracias a ello”, señaló el artista, que logró llegar con su publicación a diferentes puntos del mundo.

Empezó y trabajó, durante mucho tiempo, solo. “La revista fue mi gran proyecto”, destacó, puesto que en cada número contó con participaciones de importantes teóricos y artistas del campo y, gracias a la corriente de arte correo, su publicación llegó a referentes, fundaciones, galerías y archivos de diferentes países. “La revista Hotel Dadá se puede encontrar en el Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona o en Artpool en Hungría”, destacó Silvio.

Pero su fortaleza fue luego su debilidad. El correo, que antes solía ser barato, dejó de serlo y, como su distribución dependía de forma considerable de ello, se vió afectada. “La mayor parte de la edición se mandaba afuera, y enviar gran cantidad de revistas al mundo era muy costoso”, lamentó el artista, que, junto a su mujer, Ana Montenegro, decidieron un giro para el proyecto.

Es que ambos son artistas y curadores y, en 2020, abrieron su galería, también llamada Hotel Dadá e impulsaron la publicación de obras con el sello editorial homónimo. Todas las energías están puestas allí,

Cabe señalar que el espacio, ubicado en Chávez 69, abre jueves, viernes y sábados de 18 a 20, y es la única galería del país especializada en arte correo y poesía experimental de forma profesional, por lo que tanto artistas nacionales e internacionales, como teóricos de peso en el campo, hacen su paso por ella de forma periódica. Entre ellos, se destaca John Held Jr., ilustrador estadounidense.

Carrera internacional

“Palabras prohibidas”, del 2022, fue la primera muestra de Silvio presentada en Hotel Dadá, y tan sólo la segunda que hizo en Junín.

Es notable cómo el crecimiento de su carrera se dio cuando estableció vínculos tras las fronteras. Lo que empezó con un contacto casual con un curador en una galería de Quilmes hoy significa gran parte de su trayectoria por el mundo. “Fue el gran despegue de mi carrera como performer”, destacó Silvio, que, desde entonces, comenzó a recibir honorarios por presentarse y viajar, conoció a otros artistas y adquirió visibilidad. 

“Descubrí una escena internacional con mucho movimiento, festivales y encuentros. Desde el principio me planteé que quería trabajar y crecer hacia afuera”, agregó el artista, que en su extensa biografía la lista de lugares visitados y proyectos en los que participó parece interminable. 

Bienales en La Habana, presentaciones colectivas y participaciones en Canadá, Italia, Serbia, Reino Unido, Grecia, Portugal, España, Japón y varios países de Latinoamérica son parte de su historia personal y profesional, porque, sobre todo en la vida de un artista, es difícil separar ambos ámbitos.

Pero no estuvo, ni está, solo. Silvio hace dupla con alguien que lo entiende y sabe de su pasión, la poeta, curadora y performer Ana Montenegro. “El trabajo juntos es magnífico, los dos tenemos los mismos intereses y nos apoyamos mutuamente”, destacó Silvio.

Su mujer y compañera desde hace 7 años es el complemento ideal para llevar adelante los mejores proyectos. “Compartimos todo, vida y arte”, expresó el artista.

Su aporte al campo

Aunque parezca mucho, el trabajo de Silvio no se agota en la producción propia de obras y performances, ni tampoco en el trabajo al frente de la galería o en las aulas. Además de ser curador independiente, desarrolla material teórico en el campo artístico, e, incluso, colabora en la revista canadiense Inter Art Actuel.

“Para mí siempre fue importante aportar teoría y conocimientos. Es fundamental contar con análisis crítico en el campo”, explicó el artista y, a propósito de ello, agregó: “Me interesa mucho cubrir todos los aspectos en el mundo del arte”.

Por su parte, también dedica su tiempo a cuidar y mantener el Archivo Hotel Dadá, un reservorio de libros, publicaciones y obras de todo el mundo que está dispuesto para ser consultado por quien lo desee.

El aporte al campo, además, lo reafirma desde el contacto con los visitantes a la galería, en la instancia de intercambio didáctico que siempre realiza en cada muestra.

“Presentamos las obras, explicamos y se da información y contexto”, señaló Silvio, a propósito de que “hay lenguajes del arte contemporáneo que necesitan un apoyo teórico para que el espectador pueda acceder y decodificarlo”.

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